Para calcular el número de muertes evitables, el estudio utiliza datos de mortalidad por causas naturales específicas de cada ciudad relativos al año 2015 y procedentes de la base de datos de Eurostat y aplica la evidencia científica más sólida y reciente sobre la relación entre los niveles de contaminación del aire y la mortalidad. El estudio sigue un enfoque de evaluación de riesgos comparativo, al comparar los niveles actuales de contaminación del aire en las ciudades con dos escenarios teóricos de mejora de la calidad del aire (recomendaciones de la OMS y niveles medidos más bajos). El número de muertes evitables se estima en función de estas reducciones y de la evidencia científica sobre la relación entre contaminación atmosférica y mortalidad.